BATALLONES DE TRABAJO FORZADO
(Batallón de Soldados Trabajadores nº 91. En la construcción de la carretera del Teide.Canarias. En la foto aparece Luis Zelaia)
En relación al tema de batallones de trabajo, se puede decir que se trataban de batallones de trabajadores esclavos, condenados en dicho lugar a redimir sus penas. La normativa entro en vigor a finales del año 1938 y se mantuvo durante todo el régimen franquista
Para todos los prisiones políticos , era la Junta de Calificación correspondiente la que analizaba a que lugar debería ir cada persona:
Si la persona no tenía ninguna cuenta pendiente pero se le consideraba desafecto al régimen (que era en la mayoría de los casos), se le remitía a un batallón disciplinario (BD);
Si ya había realizado la mili, pasaba a un batallón de trabajadores (BT);
Si era joven y desafecto al régimen, pero su quinta no había sido movilizada, pasaba a cumplir la pena correspondiente y después tenía que realizar el servicio militar. Algunas personas estuvieron entre un caso y otro hasta cuatro años;
Si su quinta había sido movilizada durante la guerra y era considerado desafecto al régimen pasaban a batallones de trabajadores.
Fue en 1940 cuando se crearon los batallones de soldados trabajadores (BDST), con lo que todas las personas que estaban en batallones de trabajadores (BB.TT.) pasaron a formar parte de los batallones de soldados trabajadores, previo paso por la caja de reclutas de la región militar correspondiente.
Dicha caja de reclutas analizaba los informes de cada persona y si tenía alguna denuncia o la Junta de Calificación correspondiente lo consideraba peligroso lo remitía al Juzgado Civil o Militar. La condena la tenía que cumplir en los batallones de soldados trabajadores. A los años, dichos batallones adquirieron también el nombre de Batallones Disciplinarios de Soldados Trabajadores Penados (BDSTP). Diferentes nombres para designar una misma realidad, batallones de trabajo esclavo.
El destino era, en su mayoría, lugares lejanos donde tenían que trabajar en la construcción de infraestructuras en general (carreteras, vías de tren, túneles, etc.), así como construcción de fortificaciones militares y labores de reparación de todo tipo.
Numerosas empresas cómplices del régimen franquista, obtuvieron grandes beneficios con todo ello. Cada trabajador tenía un «salario» concreto, la empresa a la que se le destinaba se quedaba con el 75% en concepto de manutención y alojamiento. El resto se enviaba a las familias que, en algunos casos, era el poco ingreso que podían obtener.
Para el seguimiento de redención de penas se estableció el Patronato Central de Redenciones de Penas por el Trabajo (PCRPT).
El sistema de conmutación era: un día trabajado equivalía a dos días de pena. Aunque ello no fue algo generalizado, dependía de las anotaciones de los guardianes sobre la calidad de su trabajo.
Las mujeres no estaban encuadradas dentro de los batallones de trabajo militares, aunque sí pasaban por el Patronato Central de Redenciones de Penas de Trabajo. Solían trabajar en las cárceles y sufrieron también trabajo esclavo.
BATALLÓN DE TRABAJADORES EN ALTSASU
(Algunos Soldados Trabajadores del 95º Batallón posan en la foto, frente al Parador Mendia)
95 Batallón de Soldados Trabajadores
Para realizar el desdoble del tramo de la vía del ferrocarril Altsasu-Ziordi-Agurain, desde el año 1939 al 1943 estuvieron nada más y nada menos que 1150 personas, en condiciones de esclavitud.
Los barracones estaban situados cerca del hotel Mendía. La ropa de trabajo era un traje de tela «mil rayas», con dos «P», una en el gorro y otra en el pecho (en el lateral izquierdo).
La cantera de Orobe era el lugar donde acudían para extraer piedra y cargarla en vagones de tren que eran llevados para la construcción del tramo del ferrocarril.
Según el testimonio de Ignacio Argiñarena (listero de la cantera de Orobe): «Los prisioneros eran maltratados, mal vestidos sin apenas calzado, forzados hasta el límite de sus fuerzas, mal alimentados y muchos enfermos (Tuberculosis, sarna, piojos). La labor consistía en extraer balasto (grava) de la cantera para asentar y sujetar las traviesas del ferrocarril.
La Guardia Civil con sus grandes abrigos, botas y bufandas formaban un inhumano contraste con los “andrajosos” prisioneros. Si algún día los prisioneros no cumplían su tarea prevista, les golpeaban e insultaban. Cada día debían salir 74 vagones de grava de dicha cantera donde se trabaja hasta última hora del día, incluso se instalaron potentes focos para poder trabajar en horas oscuras. Los días de lluvia y nieve más de un vagón solía ir vacío y las amenazas y golpes eran constantes. Varios prisioneros murieron debido a las condiciones extremas que tuvieron que padecer».
Homenaje y escultura en la plaza Zubeztia
En junio de 2008 se realizó un homenaje y se colocó una escultura en recuerdo del batallón de Alsasua.
El encargado de descubrirla fue Isaac Arenal, un comunista madrileño que llegó a Alsasua en el verano de 1943 junto con otros 300 hombres en un batallón de penados. Estuvo alrededor de un año. Sus vivencias quedaron recogidas en el libro 95 Batallón de Soldados Trabajadores.
Numerosas personas se concentraron para rendir homenaje a todos los que pasaron por dicho batallón, entre ellas, Paquita y Carmen Agirrebengoa mostraban el brazalete que llevó su padre durante tres años como trabajador del batallón 65. Tenían 9 y 11 años cuando su padre estaba en el batallón:
«Al principio le mandaron a Tarragona. De Alsasua mandaban malos informes. Cuando volvió, le siguieron castigando. Trabajaba en Renfe y nunca le dejaron volver a trabajar en el pueblo», recordaba Carmen. «La pena es que no haya visto esto».

Tambien habia en Altsasu Trabajadores Soldados del Batallón 89.
Jefes de la compañía batallan 89 :
De enero de1941 a junio de 1941 el comandante Luis Molina y su ayudante el alférez Ignacio Souviron Huelin recibían la orden de inspeccionar mensualmente las compañías del batallón 89, destacados en tareas militares en Alsasua (Navarra), en Villafria (Burgos y en Nanclares de la Oca (Álava), para lo cual se les expedía un pase para viajar por ferrocarril. Estas inspecciones devengaban 4 días de dietas con un coste mensual de 169 pesetas.873

(Cantera de Orobe, lugar donde se sacaba la piedra, donde los prisioneros eran explotados hasta el último aliento)
Ver- http://iarenalcardiel.blogspot.com/2009/06/blog-post.html
Altsasu 1943
[Homenaje a los presos trabajadores en Altsasu ]
